Halloween dejó de ser solo una fecha para que los niños pidan dulces, pues en la Ciudad de México y otros sitios similares, cada vez más adultos aprovechan esta festividad para armar reuniones con amigos y familia.
Globos, disfraces, luces tenebrosas, snacks y hasta DJs forman parte del menú de quienes buscan vivir una noche llena de diversión y, por supuesto, buena música.
Pero la gran pregunta es: ¿cuánto cuesta organizar una fiesta de Halloween? La respuesta depende de qué tan grande quieras el susto y, sobre todo, de tu presupuesto.
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Organizar una fiesta casera de Halloween tiene un costo promedio de 4,000 pesos, considerando lo básico:
Este es el escenario más accesible, pero claro, todo puede subir si decides añadir extras como disfraces temáticos para los invitados o un pastel especial decorado para la ocasión.
Si en lugar de solo poner una lista de reproducción en tu celular quieres llevar tu fiesta al siguiente nivel, el gasto sube considerablemente.
Contratar un DJ para Halloween puede costar desde $3,000 hasta más de $15,000, dependiendo de la duración del evento, el prestigio del DJ y el tipo de equipo de sonido que se necesite.
El servicio básico suele incluir consola, bocinas y luces, pero hay paquetes que agregan pantallas, animadores e incluso cabinas temáticas.
En ese caso, hablamos ya de una fiesta que compite con las de un antro, pero sin salir de casa.
El rango es amplio. Una fiesta casera de Halloween modesta puede organizarse con poco más de $4,000, pero si decides invertir en ambientación profesional y un DJ en vivo, el gasto fácilmente puede llegar a los $20,000.
La recomendación es que armes un presupuesto antes de lanzarte a comprar calabazas y luces led. Define si tu prioridad será la decoración, la comida o la música, porque ahí estará la clave de cuánto gastarás.
También conviene coordinarse con los invitados para que cada quien aporte algo, lo cual reduce costos sin sacrificar diversión.
La demanda por fiestas privadas en fechas de Halloween ha impulsado negocios de todo tipo, desde renta de disfraces hasta servicios de catering con menús temáticos "de miedo".
El auge también se refleja en plataformas de DJs y empresas de renta de sonido, que reportan mayor actividad desde mediados de septiembre hasta el 2 de noviembre.
No cabe duda, Halloween se ha convertido en una oportunidad para socializar, pero también en un evento que mueve la economía en entretenimiento, gastronomía y hasta decoración. Acerca de la autora: Itzel Navarrete es periodista financiera apasionada por el poder de las palabras y la creatividad; escribe todos los días en DeDinero de El Universal.