¿Alguna vez has escuchado sobre el Buró Laboral? Pues en esta ocasión en DeDinero te diremos cómo funciona y si es fundamental tener un buen historial para acceder a diversos productos crediticios.
¿Qué es el Buró Laboral?
Es una herramienta en la que se recopila la información sobre el historial laboral de los trabajadores del sector formal. Esta base de datos es muy utilizada por las empresas con el fin de conocer el comportamiento de los postulantes en sus empleos anteriores.
Si bien al momento de hacer el proceso de reclutamiento se les pide una carta de recomendación del antiguo empleo, el personal de Recursos Humanos (RH) suele acudir a esta base de datos para conocer si estos empleados tienen un buen historial laboral.
Cabe señalar que, a diferencia del Buró de Crédito, esta entidad no es oficial y no está regulada por parte del gobierno. Sino que ha sido una iniciativa privada que ha sido utilizada por una variedad de empresas y consultoras para informar sobre el desempeño, conducta y antecedentes de los empleados.
Normalmente, este boletín suele incluir los siguientes datos del empleado:
- Nombre.
- Clave única de Registro de Población (CURP).
- Número de Seguridad Social (NSS).
- Puestos anteriores.
- Motivos de la salida de los empleos previos (renuncia o despido).
- Comentarios sobre su desempeño laboral y conducta en el recinto de trabajo.
- Información sobre si el empleado realizó alguna demanda laboral o tuvo algún conflicto con los empleadores.
¿Cómo me puede perjudicar o beneficiar el buró laboral financieramente?
Si bien esta herramienta es totalmente diferente al Buró de Crédito, como mencionamos anteriormente, esta base de datos es utilizada por los empleadores o el personal de RH para determinar si se le brinda o no la plaza laboral al postulante.
Por ejemplo, si el solicitante demandó a la empresa en donde trabajaba, este contará con una mancha en su historial laboral, por lo que es probable que a este trabajador se le dificulte ingresar a una empresa.
De esta forma, al no encontrar trabajo, no podrá generar los ingresos para poder solventar los gastos primordiales como es el pago del agua, de la luz, del gas, así como el tema de la alimentación, transporte y renta o hipoteca.
De igual forma, al no contar con percepciones fijas, las instituciones bancarias no podrán brindarle opciones crediticias, por lo que esta persona no tendrá un historial crediticio.
Es por ello que diversos reclutadores les recomiendan a los trabajadores mantener una buena actitud y un buen desempeño en su trabajo, para que de esta forma el historial sea positivo y no se les cierren las puertas de las empresas.
Daniel Fitta es un periodista de DeDinero apasionado por las finanzas personales.
