Existen casos desafortunados donde las deudas se vuelven difíciles de pagar, se acumulan los intereses y esto puede generar grandes cantidades de estrés financiero, tal como ha explicado la Condusef.
Lo anterior afecta especialmente a quienes han dejado de pagar sus tarjetas de crédito, y es que estos productos suelen tener las tasas de interés más altas entre todos los productos financieros que se ofrecen en México y nadie está exento de una mala racha.
Afortunadamente existen tres opciones para utilizar como último recurso, es decir, cuando ya no puedas realizar los pagos mensuales, y la Condusef explica que cualquier persona endeudada con alguna institución financiera puede recurrir a una consolidación, reestructuración o quita.
Lee también ¿Cómo puedo recibir dinero de mi familiar que vive en Estados Unidos?
Esta primera opción consiste en agrupar todas tus deudas en una sola, de modo tal que la institución financiera transfiere el saldo de todas tus tarjetas de crédito a un solo plástico; de esta manera, puedes elegir la opción que ofrezca el menor Costo Anual Total (CAT) e intereses.
Otra ventaja de consolidar tu deuda es que puedes cancelar las demás tarjetas de crédito y así evitar las comisiones anuales, aunque debes considerar que no todos los bancos ofrecen esta opción, por lo que te conviene solicitar informes.
Las reestructuraciones están disponibles tanto para tarjetas de crédito como para otros tipos de préstamos, tales como los hipotecarios y de automóviles; generalmente conlleva acordar un nuevo plazo, una reducción de la tasa de interés o bien la aplicación de pagos fijos.
Lee también ¿Cuántas horas puedes trabajar como máximo si sales después de las 8 pm en México?
Considera que tras reestructurar tu deuda, si mantienes tus pagos en tiempo y forma seguirás disponiendo de un buen historial crediticio, de manera que podrás seguir accediendo a buenas ofertas en el futuro.
Por último están las quitas, en las cuales llegas a un acuerdo establecido por el acreedor para que puedas liquidar la deuda en su totalidad mediante un descuento, el cual varía según la institución que te haya prestado dinero.
Cuando recurres a esta alternativa, la institución está obligada a proporcionar una carta convenio donde se especifique lo pactado de forma clara, esto con fechas y montos a pagar para liquidar la deuda en su totalidad.
Sin embargo, esta opción presenta una desventaja, ya que cuando pagas una deuda con quita se reporta una mala nota ante el Buró de Crédito, puesto que representa un quebranto financiero para la institución que te había otorgado el crédito, como explica la Condusef.
Debes saber que, según la Ley de Protección y Defensa al Usuario de Servicios Financieros, todos los bancos deben contar con una Unidad de Atención Especializada (UNE), a donde puedes dirigirte y comentar que deseas liquidar tu adeudo.
Como dato adicional, existen algunas empresas autodenominadas como "reparadoras de crédito" cuyos servicios involucran ayudarte a resolver tus deudas y negociar descuentos con la institución acreedora, lo cual podría ayudarte.
Sin embargo, considera que en México no existe esta figura legal, de manera que las reparadoras de crédito no están reguladas ni supervisadas por el gobierno, de modo que no se puede presentar reclamos en caso de incumplimiento.