El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ofrece oportunidades únicas para aquellos contribuyentes que desean ponerse al día con sus obligaciones fiscales.
Desde plazos accesibles hasta descuentos en multas, estas medidas buscan aliviar la carga económica y fomentar el cumplimiento fiscal en México.
Regularizar tus deudas con el SAT puede parecer un desafío, pero ahora es más sencillo gracias a las facilidades que esta institución pone a tu alcance.
Si eres una persona física o moral que enfrenta adeudos fiscales, el SAT entiende las dificultades que pueden surgir y ha diseñado esquemas para que puedas cumplir con tus compromisos sin comprometer tu estabilidad financiera.
Entre las opciones disponibles destacan los plazos de pago a meses, los cuales pueden ser hasta en 36 mensualidades; estas te permiten fraccionar tus adeudos de manera accesible.
Además, es posible obtener reducciones en multas y recargos de hasta 100% de la multa, siempre y cuando se cumplan ciertos requisitos.
Estas iniciativas no solo alivian la carga económica, sino que también te ofrecen tranquilidad al evitar acciones legales o embargos.
En el pago a plazos, existen dos opciones:
Pago en parcialidades: El adeudo se puede liquidar hasta en 36 meses, con un pago inicial de al menos 20% y una tasa de interés fija:
- De 1 a 12 meses la tasa es de 1.26%
- De 13 a 24 meses la tasa es de 1.53%
- De 25 a 36 meses la tasa es de 1.82%
El proceso es claro y amigable. Puedes consultar los montos adeudados y gestionar las facilidades desde el portal oficial del SAT, donde encontrarás toda la información necesaria.
Si tienes dudas sobre tus adeudos y multas, el SAT te invita a una cita personalizada. Agenda en citas.sat.gob.mx y descubre las opciones de pago que mejor se adapten a ti.
La clave está en actuar pronto. Aprovechar estas facilidades no solo mejora tu situación fiscal, sino que también fortalece tu estatus como contribuyente. El SAT busca impulsar una cultura de cumplimiento y responsabilidad, apoyando a quienes toman la iniciativa de regularizarse.
