Para miles de mexicanos que cotizaron bajo la Ley 73 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el 2026 traerá un alivio en sus ingresos.
Y es que la pensión mínima garantizada (es decir, el monto más bajo que un jubilado puede recibir) tendrá un ajuste.
Hoy en día, los pensionados reciben una pensión mínima vinculada al salario mínimo vigente, y la expectativa es que, con el aumento salarial programado para 2026 y la inflación acumulada, esta prestación mejore.
En 2025 el monto mensual va de $3,414.56 hasta $10,732.00 pesos, en función del número de semanas cotizadas, salario base de cotización y edad.

¿Cómo se calcula la pensión mínima?
La pensión mínima garantizada no es un número fijo, sino que depende de dos factores: el salario mínimo general y el ajuste por inflación.
Esto significa que, aunque la cifra final se definirá conforme a las actualizaciones económicas oficiales, los pensionados que reciben el mínimo ya pueden anticipar un aumento, con posibilidad de alcanzar un poco más si el salario mínimo registra un ajuste mayor en 2026.
¿Es suficiente frente al costo de vida?
El aumento de la pensión mínima representa un avance, pero no resuelve del todo la brecha entre lo que se percibe y lo que realmente cuesta vivir en México.
El alza de precios en alimentos, servicios básicos, transporte y medicamentos ha puesto presión sobre el bolsillo de los adultos mayores, por lo que la pensión mínima sigue resultando ajustada para cubrir gastos esenciales.
Aunque el incremento es positivo, aún existe un gran reto en términos de planeación financiera para el retiro.
La recomendación sigue siendo que, además de la pensión del IMSS, los trabajadores consideren otras fuentes de ahorro o inversión que les permitan tener un retiro más digno y menos vulnerable a los cambios de la economía.
Es importante recordar que la Ley 73 del IMSS aplica a quienes comenzaron a cotizar antes del 1 de julio de 1997. Estos trabajadores tienen derecho a una pensión calculada en función de sus semanas cotizadas, salario base y edad de retiro.
Sin embargo, quienes no logran acumular una base suficiente para acceder a un monto mayor reciben la pensión mínima garantizada, que en 2026 será más alta.
En contraste, quienes cotizan bajo la Ley 97 dependen del ahorro acumulado en su cuenta individual de Afore, lo que hace que los montos de pensión puedan variar mucho más. Acerca de la autora: Itzel Navarrete es una comunicóloga apasionada por el poder de las palabras y la creatividad; escribe sobre finanzas personales en DeDinero.