Desde 1972, cada 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente; esta iniciativa fue promulgada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en Estocolmo. Durante esta fecha, diversas organizaciones buscan concientizar a la población sobre los problemas que afectan a la naturaleza.
Durante el Día Mundial del Medio Ambiente, empresas, organizaciones y gobiernos suelen compartir estrategias para actuar de manera responsable para proteger al planeta. Uno de estos sistemas es el conocido como economía circular, el cual no solo es un modelo con el fin de ayudar al medio ambiente, sino que también es una estrategia ideal para mejorar nuestras finanzas personales.
Es por ello que en esta ocasión en DeDinero te compartimos qué es la economía circular y cómo puedes implementarla en tu vida para que puedas mejorar tus finanzas personales.
¿Qué es la economía circular?
Es un modelo económico que se fundamenta en la reutilización, reparación y reciclaje de productos. Este esquema presenta numerosos beneficios que pueden cambiar nuestra forma de gestionar el dinero.
La sostenibilidad de este enfoque arranca desde aprovechar los productos ya existentes para desarrollar nuevos, reduciendo así los desechos y la contaminación.
Este modelo es recomendado por diversas organizaciones, como la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), quienes aseguran que uno de los principales beneficios de adaptar la economía circular a nuestra vida es el de reducir nuestros gastos.
¿Cómo puedo mejorar mis finanzas con la economía circular?
De acuerdo con la Profeco, el primer paso para adaptar este esquema a nuestra vida es priorizar la compra de productos de segunda mano, o, en caso de que algún artículo se rompa, en vez de comprar uno nuevo, tratar de reparar dicho producto y así darle una segunda oportunidad para evitar realizar un gasto.
Las plataformas para intercambiar y vender artículos de segunda mano están en auge, brindando a los consumidores la posibilidad de obtener productos a precios más económicos. Asimismo, al poder seleccionar los objetos que pueden ser reparados o reciclados, las personas no solo ahorran dinero a corto plazo, sino que también fomentan un consumo más responsable y menos derrochador.
Y es que, justamente, en los últimos años, las compras de artículos de segunda mano se han vuelto populares en nuestro país, lo que termina siendo una oportunidad de emprendimiento para muchas personas, ya que esto favorece sectores innovadores, como la reparación y el reciclaje de objetos que tal vez ya no se deseen, pero que hay personas dispuestas a adquirir.
En conclusión, y de acuerdo con la Condusef y la Profeco, el adoptar este modelo económico a nuestras vidas nos ayuda a fomentar una mayor conciencia sobre el impacto financiero y el ambiental en nuestras decisiones, por lo que es importante reflexionar sobre la manera del uso de los recursos y en qué gestionamos nuestro dinero.
